Mudarse de casa suele suponer un pequeño fastidio al que todos nos hemos tenido que enfrentar alguna vez. Pero también conlleva una parte positiva: aprovechar para decorar nuestro nuevo hogar. A menudo, por circunstancias de la vida, nos vemos en la situación de tener que mudarnos con gran celeridad, o puede que tengamos que cambiar nuestra ubicación por un periodo de tres meses. Todos estos detalles resultan secundarios, lo que realmente importa es no renunciar nunca a decorar nuestra nueva estancia.

Por eso hoy os vamos a dejar con unos consejos rápidos y sencillos que conviene tener en cuenta a la hora de decorar y darle ese toque personal al que será nuestro nuevo hogar, de la manera más sencilla posible. ¡Empecemos!

Decorar nuestro nuevo hogar: un inventario de nuestras pertencias

Lo primero que conviene hacer antes de trasladarnos, es un listado completo y detallado de nuestros objetos y pertenencias. ¿Qué objetos son imprescindibles? ¿Cuáles son aquellos que realmente tienen la capacidad de hacer que nos sintamos en nuestro propio hogar? Puede que ese cuadro familiar, o esa fotografía que tanto significa para nosotros, o ese plaid, ese atrapasueños, aquella taza que tenemos siempre en nuestro escritorio y que hemos convertido casi en multiusos…

Aprovechemos para deshacernos de todo aquello que realmente no utilizamos. A menudo guardamos por guardar, por si acaso. Como decimos siempre: menos es más. ¡Así que el momento de hacer un inventario es perfecto para hacer también una buena limpieza!

Decorar nuestro nuevo hogar: cuestión de prioridades

¿Vamos a llevarnos con nosotros algún mueble? Es importante tener claro si verdaderamente nos hace falta. ¡Y si va a encajar en nuestra nueva casa! Hay que buscar siempre la funcionalidad, evitando recargar en exceso. Ser prácticos es clave.

Decorar nuestro nuevo hogar: el toque de la ropa de hogar

Si allí donde nos mudamos ya hay cama, sofá, sillones, etc., y tenemos que hacer uso de ellos independientemente de que sean de nuestro gusto, no tenemos por qué renunciar a darle ese toque personal. Aquí juega un papel determinante la ropa de hogar: colchas, mantas, plaids, cojines… Todo lo que necesitemos para que resulte armonioso estéticamente. Porque merece la pena no escatimar a la hora de adquirir menaje, y tener la sensación de que estamos estrenando casa.

Decorar nuestro nuevo hogar: apostando por tonos pastel

Por supuesto, en el caso de las paredes, no siempre tendremos la oportunidad de pintarlas. Sólo en estancias largas y concretas. Pero si podemos apostar por colores pastel, comprobaremos que son bastante fáciles de combinar con un amplio surtido de muebles y con nuestra propia ropa de hogar.

Decorar nuestro nuevo hogar: un estilo minimalista

Tengamos en todo momento en la cabeza qué necesitamos (y desde luego, qué es lo que no necesitamos). No hace falta abarrotar la casa con artículos que sólo utilizaremos ocasionalmente (y a veces ni siquiera eso). Rodeémonos únicamente de aquello que nos es útil: tal vez un escritorio, una pequeña estantería, un sillón…

Decorar nuestro nuevo hogar: aprovechando la luz natural

La iluminación siempre es clave. Hay casas que son más luminosas que otras, pero dentro de lo posible, debemos tratar de aprovechar la luz natural, ubicando nuestros muebles en función de la misma. Independientemente de ello, si tenemos que jugar con luces artificiales, pensemos muy bien dónde nos interesa colocarlas.

Decorando nuestro nuevo hogar: nuestro dormitorio, nuestro santuario

Sin tener que renunciar al estilo minimalista que mencionábamos antes, y que tan bien encajaría igualmente en nuestro dormitorio, siempre podemos permitirnos “un extra” en nuestra propia habitación. ¿Un sillón con su mantita? ¿Unos cojines que realmente nos enamoren? ¡En nuestra mano está!

Decorando nuestro nuevo hogar: el toque personal

Hay detalles que trascienden a la decoración. Se trata prácticamente de objetos de poder, como aquel póster que tantos años tuvimos colgado en nuestro cuarto, aquellos CDs de música que nos acompañan siempre (¡aunque ya no escuchemos música en CD!), o sobre todo aquel libro que nos cambió la vida y que siempre estamos dispuestos a volver a ojear.

¡Esperamos que estos pequeños consejos os resulten de utilidad a la hora de hacer una decoración exprés!